Uno de los problemas más comunes en los viajes con largas distancias es el fenómeno mundialmente conocido como “Jet Lag”. Dada la cercanía existente entre el aeropuerto de Alicante y las instalaciones de Royal Parking, nos hemos convertido en testigos diarios de ver cómo aviones que se dirigen a destinos de lo más dispares salen sin tregua cargados de pasajeros que tienen todo tipo de nacionalidades diferentes.

Los efectos del Jet Lag son extensos y varían muchos según cada persona, es por ello que los consejos que os daremos a continuación no son axiomas infalibles ante la lucha al desfase horario, sin embargo, puede que dentro de estos remedios encuentres la fórmula que le faltaba a la receta de tus costumbres de vuelo. Los síntomas más comunes suelen ser la apatía unida de cansancio mental y físico pueden hacerte sentir somnoliento durante todo el día. Los problemas para dormir debido al nuevo horario del sitio de llegada suelen ser las causas más frecuentes por los que se provoca el insomnio, el cuál puede degenerar en otros síntomas como el sentirse irritado, tener sueño durante las horas de día, además del desgano, al que no debemos permitirle hacerse con la batalla de nuestro viaje de placer o negocios.

 

¿En qué dirección voy a viajar?

Para comenzar a tomar medidas, primero es preciso que conozcas hacia qué dirección viajarás ya que existen condiciones que dependen de si te diriges de Este a Oeste o viceversa. Si vamos en de Oeste a Este estaremos perdiendo minutos, por lo que nos enfrentamos a que nuestros hábitos diarios se vean afectados. Si lo hacemos al contrario estaremos consiguiendo minutos. Los cambios al viajar de Este a Oeste suelen ser más livianos aunque los consejos a adoptar son exactamente iguales.

1.- Si viajas al Este o en el mismo sentido que en el que la Tierra rota, durante la semana anterior al viaje puedes poner tu despertador una hora antes de la que te despiertas normalmente y recuperar ese tiempo estando una hora antes en la cama. En caso de que el sentido de tu viaje sea el contrario a la rotación terrestre, en vez de disminuir una hora la incrementaremos en nuestros hábitos.

2.- Durante la noche anterior a tu viaje, es ideal que tengas un sueño en condiciones, es decir, que duermas al menos 8 horas en buen estado para sentirte con las fuerzas necesarias de afrontar un vuelo que implique condiciones de desfase horario.

 

¿Eres una persona de costumbres establecidas y no te gustan los cambios?

Como decíamos antes, cada persona es única y los síntomas que pueden sufrir dos pasajeros en el mismo viaje bajo las mismas condiciones no tienen por qué ser los mismos, pero si vas a hacer un viaje muy largo antes de comprar los billetes piensa en:

3.- Hacer una escala de uno o dos días antes de tu llegada a tu destino final. Esto te ayudará a adaptarte al horario de una manera paulatina y natural, donde el cambio de hora estará fragmentado y el impacto no será tan grande. Hoy en día que la búsqueda de vuelos al mejor precio se ha convertido en todo un arte, existen muchos destinos que nos obligan a realizar estas paradas para cambiar de avión. Si no es tu caso, puedes buscar que así sea realizando diferentes combinaciones, es más, puede que hasta tu viaje te salga algo más económico, pudiendo aprovechar para conocer otra ciudad donde descubrir, aprender y crear nuevos recuerdos.

Una vez dentro del avión y al comenzar el viaje…

Durante la gran travesía que te espera, haz de tu asiento un espacio cómodo en el que ir ya que estarás sentado muchas horas, no te desesperes y trata de exprimir esas horas para cosas productivas, este es el momento de:

4.- Cambiar la hora de tu reloj para comprender que tu horario ya no es el del lugar de partida.

5.- Trata de ajustar las horas de sueño durante el viaje, es decir, si cuando llegues deberías estar durmiendo, trata de acomodarte llevando una pequeña almohada, unos tapones. Si deberías estar despierto, llévate material de lectura, información de tu lugar de destino para conocer más y mejor hacia donde te diriges, pasatiempos, realiza tareas pendientes…

6.- Si vas a aterrizar durante la noche, evita el café, los refrescos con cafeína, el té… nada de esto te ayudará a dormir porque incrementará  tu euforia cuando llegues.

7.- Durante el viaje, camina, haz estiramientos que no molesten al resto de pasajeros como por ejemplo, decir que sí con la cabeza 20 veces de manera suave, luego otras 20 veces diciendo que no y otras 20 tocando la oreja con su hombro correspondiente de manera que ayudemos a que la circulación de la sangre y el riego no se vean afectados.

8.- Cuando tengas la necesidad de beber líquidos olvida el alcohol, lo último que quieres es que algo te siente mal durante un viaje de varias horas donde no puedes salir del avión, además, el alcohol provoca estado de deshidratación y favorece la aparición del cansancio. Mantente hidratado, es recomendable beber abundante agua durante el trayecto.

 

Sé uno más en la cultura de tu país de destino.

9.- No sólo la hora es lo diferente al llegar. Las costumbres, hábitos y tiempos varían según el lugar donde nos encontremos. Mimetízate con el resto adaptando las horas destinadas a comer y cenar a las de la costumbre local, así como los tiempos de descanso y sueño.

10.- Sal a la calle, intenta que nutrirte con el sol, tu cuerpo y tu mente lo agradecerán después de una gran cantidad de horas de vuelo. Estira bien tus músculos, haz los trámites pertinentes de traslados, estancia y demás con tranquilidad, conoce los alrededores de tu zona de descanso sin que la ambición de descubrir te gane, mejor deja las visitas largas y los planes que, aunque inolvidables pueden ser agotadores, para los próximos días de tu llegada.

11.- En Royal Parking no queremos recomendarte ningún tipo de fármaco o similares. Si estás interesado en estos métodos puedes consultar a tu médico o especialista para que vea si es un método viable por el que poder decidirse. Conocerte es el mejor método, si necesitas dormir durante el viaje y una infusión de un tipo en concreto te ayuda, esta puede ser la medida que necesites tomar.

No olvides mantener una actitud positiva, disfruta de tu viaje. Te deseamos una feliz experiencia.



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